Lo híbrido necesita un hogar: Diseñando vecindarios en el trabajo
Cómo diseñar espacios que logren que el trabajo híbrido funcione
Cuando Laura se dirige a la oficina por primera vez después de dos años sabe que las cosas van a ser diferentes. Ya no tiene ningún puesto asignado. Su empresa comenzó a utilizar espacios sin asignar cuando adoptó la modalidad de trabajo híbrido. Pasa más tiempo realizando videollamadas y a más de la mitad de sus reuniones asisten participantes remotos y presenciales. Su horario varía dependiendo de su trabajo y de su vida. Se alegra de tener un horario más flexible y una mayor autonomía, pero…
Si Laura entrase al mismo espacio de trabajo que dejó hace dos años y la única diferencia fuesen las nuevas políticas internas, la oficina podría parecer vacía, le resultaría complicado poder realizar su trabajo y podría cuestionarse si ha valido la pena desplazarse hasta allí. Espera que trabajar en la oficina sea mejor que hacerlo desde casa. Quiere conectar con las personas de manera diferente, hacer un trabajo significativo con ellas y que se sigan respetando sus límites y su necesidad de privacidad.
¿POR QUÉ VECINDARIOS?
Laura no está sola. Los estudios sugieren que, su necesidad de tener un sentido de pertenencia y control sobre el entorno, son elementos imprescindibles para las personas a medida que las organizaciones van adoptando el trabajo híbrido. La nueva realidad es que el trabajo híbrido va a cambiar los viejos patrones y comportamientos, además la gente quiere que su espacio de trabajo esté más humanizado, lo cual quiere decir que la oficina deberá responder a un nuevo conjunto de necesidades.
Los espacios de trabajo del pasado estaban inspirados en la jerarquía y la eficiencia. Nosotros creemos que ahora deberían tener una nueva fuente de inspiración: los vecindarios donde vivimos, aprendemos y crecemos. Los grandes vecindarios son diversos, inclusivos y resilientes. Acogen a las personas, las reúnen y crean un sentido de comunidad, pero van cambiando con el tiempo para ir adaptándose a las necesidades de las personas que habitan en ellos. Todos tienen una responsabilidad común, pero, aun así, las identidades individuales de las personas destacan. (Leer el porqué en El Nuevo Vecindario Híbrido). Entonces nos preguntamos, ¿por qué nuestras oficinas no pueden parecerse a los lugares que elegimos para vivir?
Si pensamos en los espacios de trabajo como en los barrios en los que vivimos, encontramos lugares públicos compartidos disponibles para todos, como parques, plazas y cafés, combinados con los vecindarios donde viven las personas y que reflejan las necesidades y personalidades únicas de los que allí residen.
Se trata de algo diferente al viejo paradigma de diseñar departamentos donde a todos se les asignaba el mismo tipo de espacio. El vecindario está diseñado para ser inclusivo porque brinda una amplia gama de espacios adecuados para distintos tipos de necesidades y formas de trabajar. Los espacios se pueden compartir o asignar según el grado de trabajo híbrido o los patrones del equipo, y el vecindario pasa a ser una base de operaciones que genera un sentido de pertenencia en las personas. (¿Recuerdas a Laura? Ella sabrá dónde encontrar a su gente y sus herramientas, y se sentirá conectada).
La planificación del vecindario se basa en espacios multimodales altamente flexibles y que admiten una variedad de tipos de trabajo dentro de un mismo entorno, lo que facilita cambiar entre trabajos de concentración individual, colaboración, socialización y aprendizaje simplemente estando juntos. La planificación es modular, permitiendo a las organizaciones modificar los entornos dentro del vecindario y ser resilientes a medida que van cambiando las necesidades del equipo. También admiten cualquier nivel de política de trabajo híbrido, así como cambios futuros.
Los vecindarios deben diferenciarse en función de muchos factores, como:
- La organización y la cultura del equipo
- El tamaño y la ubicación de la empresa
- El tipo y el proceso de trabajo
- El grado de trabajo híbrido y el nivel de movilidad de los trabajadores
Deben ofrecer equidad (experiencias inclusivas para todos, los que están de manera presencial o los que asisten de manera remota, diseñar teniendo en cuenta las aportaciones de las personas que utilizan el espacio), compromiso (una base de operaciones para equipos con una variedad de modelos de propiedad que ayuden a las personas a participar, concentrarse y mantener el flujo de trabajo), y sencillez (crear vecindarios y entornos multimodales que permitan a las personas realizar todas las actividades laborales del día y pasar fácilmente de las experiencias físicas a las virtuales).
CREACIÓN DE VECINDARIOS HÍBRIDOS
Laura y su equipo pueden sentirse más conectados como equipo y con toda la organización en un vecindario como este.
Algunos de los espacios individuales se asignan a personas que necesitan estar en la oficina con mayor frecuencia y otros son compartidos por el equipo. Ambos ofrecen un alto nivel de privacidad para que las personas puedan concentrarse en sus mesas. Pero cuando Laura necesite hacer una videollamada en privado o simplemente estar sola, tendrá aún más opciones de privacidad. Los espacios de colaboración adyacentes son cerrados y abiertos para diferentes tipos de reuniones, lo cual facilita pasar del trabajo individual al trabajo en equipo y brinda apoyo por igual a los compañeros de equipo presenciales y remotos. En el centro encontramos una especie de «jardín social», donde el equipo puede reunirse, conversar y aprender.
Al igual que en casa, el vecindario de Laura en el trabajo forma parte de una comunidad más grande donde los vecindarios y los espacios compartidos satisfacen las distintas necesidades de la comunidad. Después de todo, nos encantan nuestros vecindarios, pero también queremos ampliar nuestra perspectiva y conectarnos con personas más allá de nuestra zona de confort.
Para ver cómo unir varios espacios para crear un conjunto mejor, podemos profundizar en los entornos que podrían conformar un vecindario híbrido.
Espacios de equipo no asignados
El acceso a espacios privados es fundamental para los trabajadores híbridos como Laura. Su nuevo vecindario híbrido le permite elegir su nivel de privacidad. ¿Está oyendo a otra persona compartir información y solo necesita un rincón con privacidad visual y unos auriculares? ¿Debe hacer una presentación y necesita más privacidad acústica? Sea como sea, sus necesidades están cubiertas.
Jardín social
En el centro del vecindario, este espacio social común combina una sensación de sala de estar con una sala de conferencias de alto rendimiento para crear un lugar donde los equipos pueden reunirse, reconectar y crear confianza.
Espacio de colaboración abierta
Cuando llegue el momento de que el equipo de Jo tenga que llevar a cabo una lluvia de ideas y generarlas, necesitará un espacio que les ofrezca algo más que una sala de conferencias tradicional. Este espacio está diseñado para incluir a los compañeros de equipo remotos gracias a una gran pantalla y pizarras móviles y ligeras que permiten que los compañeros presenciales puedan colocar el contenido a la vista de la cámara.
Hogares asignados
Esta parte acogedora y vibrante del vecindario brinda a Jo y a su equipo un destino al que pueden acudir al llegar a la oficina. Genera un sentido de pertenencia porque el equipo sabrá dónde están las personas, qué herramientas y objetos tienen a su alcance, y también les ofrece la posibilidad de acceder a espacios individuales y compartidos.
Los Vecindarios son únicos
Seguramente cada vecindario se diseñará de manera diferente en función de la cultura del equipo, el proceso de trabajo y el enfoque híbrido.
Vecindario Nómada
Un vecindario nómada para trabajadores no asignados podrá contar con una diversidad más amplia de entornos proporcionados para ofrecer a las personas el mayor grado de elección y control y satisfacer su amplia gama de necesidades.
Vecindario del equipo
Por otro lado, los vecindarios del equipo probablemente incluirán estudios de proyectos para facilitar el trabajo generativo, así como espacios de concentración individual para permitir el flujo constante entre el trabajo individual y el de equipo.
CUATRO PRINCIPIOS DE DISEÑO DEL TRABAJO HÍBRIDO
En todos los vecindarios se dan cuatro principios clave de diseño universales.
- Individual + Colaboración: Diseño de espacios que apoyen tanto a individuos como a grupos, permitiendo transiciones fáciles entre ambos.
- De fijo a flexible: Creación de espacios haciendo menor hincapié en la arquitectura y el mobiliario fijos y centrándose más en la manera de adaptarlos fácilmente en un momento y a medida que avance el tiempo.
- Abierto + Cerrado: Los espacios abiertos son inherentemente más flexibles, lo que invitará a una mayor colaboración. No obstante, las personas quieren un mayor control sobre sus límites y, aunque no siempre van a necesitar espacios totalmente cerrados, necesitarán una mayor accesibilidad a espacios privados.
- Uniendo digital + físico: En definitiva, en esto es en lo que se basan los espacios de colaboración híbridos. La tecnología y el espacio deben considerarse de manera integral porque así es como se va a llevar a cabo el trabajo.
Creación de vecindarios híbridos: Ver nuevos espacios diseñados para satisfacer las necesidades de las personas en el espacio de trabajo híbrido.
EXPLORAR EL VECINDARIO HÍBRIDO