La nueva oficina de Hawaii State Federal Credit Union prioriza el bienestar, la colaboración y la comunidad
Los tres pilares estratégicos de la entidad financiera han logrado reunir a los equipos bajo un mismo techo, reavivando así su compromiso con la comunidad.
En el año 2020, el equipo de Hawaii State Federal Credit Union (HSFCU) estaba empezando algo extraordinario. Tras adquirir recientemente un edificio de diez plantas en el centro de Honolulu, la organización planeaba renovar el espacio y reubicar a los 240 empleados de las tres oficinas bajo un mismo techo.
Sin embargo, al iniciarse el proyecto, la pandemia de COVID-19 se fue colando en la vida diaria. Imaginar un nuevo espacio de oficinas se convirtió en todo un desafío con empleados que, de la noche a la mañana, comenzaron a trabajar desde casa. Así que el equipo trató de centrarse en su objetivo final: crear un espacio que uniera a todos los equipos y respetara su cultura integradora y participativa.
“El compromiso de Hawaii State Federal Credit Union con su gente fue lo que realmente me entusiasmó de trabajar en este proyecto”, dice Alan Gerencer, arquitecto principal de ZGF Architects. “El proceso de diseño comenzó al principio de la pandemia, cuando el bienestar estaba en la mente de todos y hacíamos todo lo posible por mantener las distancias con nuestros compañeros. La HSFCU era muy previsora y quería que abordáramos estas preocupaciones, pero también que tuviéramos presente el futuro”.
El equipo estaba ansioso por crear un espacio de trabajo que fomentara el bienestar físico y mental, donde la gente quisiera estar todos los días. Para desarrollar este entorno, se identificaron tres pilares estratégicos: Experiencia inspiradora, Colaboración y conexión, y Flexibilidad y adaptabilidad.
EXPERIENCIA INSPIRADORA
Para centrarse en el bienestar mental, se creó una sala CALM (Cleanse. Awaken. Lounge. Meet) en cada planta. Al salir del ascensor, los empleados son recibidos por el sonido del goteo del agua. Hay un lavabo para lavarse las manos -un guiño a las prácticas higiénicas de la pandemia-, un cómodo conjunto de asientos y una gran variedad de bebidas frías y calientes.
“Ha sido un esfuerzo de colaboración con nuestros diseñadores”, afirma Allison Maertens, Vicepresidenta Sénior de Cultura y Comunicación de HSFCU. “Compartían la importancia de crear un espacio que facilitara a los empleados acudir a la oficina cada día. Si tenían un largo viaje al trabajo, tenían que dejar a los niños, o se dirigían a un día ajetreado, CALM Lounge es una manera para que puedan descomprimir, depurar, hacer su café antes incluso de poner un pie en su puesto de trabajo.”
Para favorecer el bienestar físico, las escaleras se han renovado con gráficos en las paredes que animan a los empleados a saltarse el ascensor.
“Queríamos que la gente tuviera la oportunidad no sólo de trabajar en su puesto individual, sino de poder encontrar un lugar en el que se sintiera más inspirada y productiva”, dice Gerencer. “Diseñamos una gran variedad de espacios, interiores y exteriores, de grupo e individuales, luminosos y poco iluminados, suaves y más rígidos. Todas estas opciones hacen que la gente sienta que el espacio se ha diseñado pensando en ellos y eso hace que la gente se sienta valorada.”
COLABORACIÓN Y CONEXIÓN
Al reunirse personas de varias oficinas, era importante ofrecer espacios sociales para que los empleados pudieran juntarse y celebrar. En la décima planta hay una cocina, una sala de descanso y salas de estar con muebles cómodos y fácilmente configurables para organizar eventos de networking, fiestas de equipo y cualquier otra ocasión.
“Nuestra cultura tiene un gran éxito gracias a las relaciones que establecemos no sólo con nuestros socios, sino también entre nosotros como compañeros de trabajo. Queríamos espacios que fomentaran ese tipo de conexión y propiciaran esos encuentros y conversaciones casuales que te alegran el día”, dice Maertens.
¿La clave para una mayor colaboración? Más espacios de reunión. “Pasamos de un edificio con solo cinco espacios de reunión cerrados a uno que tiene casi treinta”, prosigue Maertens. “Prometimos a los empleados no solo que íbamos a tener exponencialmente más salas de reunión, sino que íbamos a ofrecerles una variedad de estos espacios”.
A lo largo de las distintas plantas, los asistentes pueden reunirse en salas para grupos más reducidos o escaparse a una sala para trabajar individualmente. Para conversaciones menos formales, hay zonas de colaboración abiertas en cada esquina. Con mesas de café y cómodos asientos, perfectas para reuniones improvisadas.
“Cuando paseas por la oficina, ves a gente conversando en sus mesas, charlando mientras toman un café o en una sala de reuniones”, dice Maertens. “Nuestro nuevo espacio ha amplificado nuestra capacidad de conectar entre nosotros y disfrutar juntos en el trabajo”.
FLEXIBILIDAD Y ADAPTABILIDAD
Dado que el mundo financiero cambia con rapidez, el equipo quería crear un espacio que permitiera a los empleados ser ágiles, mejorar continuamente sus competencias y abrazar el futuro.
Las salas flexibles se crearon para acomodar cualquier evento, desde sesiones de estrategia hasta baby showers. El mobiliario se puede desplazar y apilar fácilmente, y la pared acristalada de la sala Hibiscus da a la azotea.
“Abordamos los espacios exteriores del mismo modo que los interiores. Queríamos desdibujar por completo la línea entre ambos con paredes móviles y aplicaciones flexibles de mobiliario”, dice Gerencer.
Desde que finalizó la mudanza en junio, la respuesta del equipo ha sido enormemente positiva.
“Sabíamos desde el principio que esto era más que un proyecto de renovación del edificio”, dice Maertens. “Era una oportunidad para inspirar nuestra forma de trabajar, nuestra cultura y el compromiso de los empleados. Después de tres años trabajando en este proyecto, mi mayor alegría es ver cómo la gente utiliza estos espacios que hemos creado para ellos. Nuestros empleados han dado vida a nuestro edificio”.