Los insights progresistas sobre el papel de los líderes son fundamentales para la cultura evolutiva de Steelcase. En lugar de dejar que sean los principales encargados de la toma de decisiones, recluidos en sus despachos privados, Jim aboga por el concepto de líderes que trabajan como conservadores del entorno, tomándole el pulso a la organización, viendo las oportunidades y dotando a los trabajadores de autonomía. Esto fomenta la creación de una organización más ágil que puede percibir y aprovechar las posibilidades de innovación.

«El objetivo de los directivos solía ser distribuir el poder y los recursos para fomentar la optimización. Actualmente, es responsabilidad del directivo escuchar, asesorar, nutrir y seguir fomentando la toma de decisiones entre los equipos que realmente hacen el trabajo», explica Keane.

El LINC fue diseñado para crear experiencias que refuercen esta filosofía. El equipo ejecutivo de Steelcase se encuentra en una posición central, ocupando un espacio abierto cerca del WorkCafé, por donde transitan y se reúnen las personas. Esto hace que los directivos sean visibles y accesibles para los trabajadores y visitantes, fomentando las conversaciones informales y frecuentes.

«Depende de la interacción humana, la exploración y la experimentación».

James Ludwig

Experiencias inmersivas de visitantes

«El LINC no es una exposición. Es un espacio donde se produce el aprendizaje y la innovación. Queremos inspirar a nuestros clientes para que usen su espacio de trabajo de manera que refuerce su propósito y alinee su estrategia, marca y cultura», dice Gale Moutrey, Vicepresidenta de comunicaciones.

El edificio invita a la curiosidad. Con sus fachadas completamente acristaladas, desde fuera se puede ver claramente qué sucede dentro, proporcionando una idea de la empresa y de cómo se desarrolla el trabajo en la misma antes de que alguien entre por la puerta. En el vestíbulo no hay mostrador de recepción. En su lugar, las opciones para sentarse fomentan las charlas breves o los paréntesis deliberados.

Hay un conserje dispuesto a ayudar cuando sea necesario, y la escalera abierta invita a los visitantes al WorkCafé y a explorar las plantas superiores. Visitantes y trabajadores pueden entremezclarse e interactuar libremente. Esto brinda a los visitantes la oportunidad de obtener verdaderos insights sobre cómo trabajan aquí las personas, y a los trabajadores de hablar directamente con los clientes sobre lo que están experimentando, lo que puede estimular nuevas ideas y ayudar a definir nuevas oportunidades.

Cualquier cantidad de tiempo que pasen en el LINC, ya sea en persona o virtualmente, es una oportunidad de experimentar de primera mano cómo este espacio puede impulsar el aprendizaje y la innovación.

Para los visitantes, las salas específicas para conocer el proceso de innovación y la sala denominada “sandbox” por ser un espacio de experimentación, proporcionan entornos inmersivos para facilitar la exploración, en los que se puede descubrir, mientras que las terrazas al aire libre circundantes permiten momentos de contemplación y descanso.

«El LINC es mucho más que una nueva instalación con un “factor sorpresa” en la que los visitantes pueden compartir experiencias o reunirse con nosotros. En su lugar, es un destino para la exploración y el descubrimiento», dice Moutrey. «A menudo, los clientes nos dicen que inicialmente vienen aquí pensando que saben en qué quieren que se conviertan sus lugares de trabajo, pensando que necesitan reemplazar sus oficinas privadas por planes completamente abiertos, por ejemplo. Pero sus experiencias aquí son expansivas. Encuentran todo tipo de nuevas posibilidades, y se van con una comprensión más profunda de cómo los espacios pueden llegar a afectar su negocio y los problemas a los que se enfrentan».

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