Las oficinas con espacios abiertos han sido la solución para unir a los trabajadores a fin de impulsar la colaboración, construir relaciones y desarrollar nuevas ideas. Sin embargo, mientras la comunicación se acelera y la transparencia estimula la confianza, las personas están buscando de forma desesperada la manera de controlar su privacidad. La principal distracción no es visual: es el ruido.

La necesidad de reducir ruidos en las oficinas es mayor que nunca. Este cuadernillo descubre cuáles son las razones y plantea soluciones para disponer de espacios de trabajo sin ruidos. De esta forma, podremos mejorar el bienestar y la productividad de nuestros trabajadores.

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